sábado, 27 de diciembre de 2014

Röyksopp & Robyn - "Monument"

Pues Röyksopp son dos, en concreto de Noruega, y Robyn una, claro está,... de Suecia. Para que nos vamos a complicar la vida con presentaciones. "Monument" es una más de las colaboraciones emprendidas por estos artistas de la vieja Escandinavia, ese lugar tan ocupado en los últimos años en generar propuestas culturales con la tecnología como punta de lanza. Además, todo queda en casa: Max Vitali, director del videoclip en cuestión, es pareja de la zancuda sueca, así que la criatura se ha ido gestando también en los escenarios domésticos. 


Todo es muy místico, trascendental, como muy abstracto... una especie de senda hacia lo más íntimo del ser a través de dos realidades antagónicas. ¿Cómo hacemos para que comulguen juntos máquina y natura? Aquí radica el dilema de tantos y tantos diletantes del tecno, tan obsesionados en sacarle unas lagrimillas al robot aún a costa de caer en la sensiblería más extrema. No es el caso que nos atañe. La idea rezuma equilibrio. "Monument" compensa sensibilidad, reflexión y vanguardia, algo muy del XX y que avanzado el milenio necesita acompañarse de un audiovisual excepcional para no repetir esquemas. No obstante, es difícil. Por cierto, saludos de Robyn a Juliana Cerqueira Leite. La clave, en sus esculturas.


domingo, 7 de diciembre de 2014

Pau Vallvé - "17820"

Es el código postal de Banyoles, el lugar elegido por Pau Vallvé para empezar de nuevo. Pels dies bons parece un álbum fotográfico aún por terminar, tal vez incluso por comenzar. Para su creación el autor abandonó la ciudad y buscó cobijo en la naturaleza; necesitaba un lavado de coco. La verdad es que esto no es muy nuevo. La idea del genio que regresa a las montañas para encontrarse consigo mismo viene de mucho tiempo atrás. Incluso cuando Fray Luis de León decía aquello de la "descansada vida" y lo "del que huye del mundanal ruido" ya resultaba desfasado, pues un tal Horacio allá por el siglo I a.C. estaba sentando las bases del tópico.


El último trabajo de Pau Vallvé huele a 'beatus ille' por los cuatro costados: retiro natural, soledad, pájaros, un lago, poemas que se hacen música, todos los instrumentos en manos del artista, videoclip de producción propia, diseño y estampados elaborados uno a uno, y más etcéteras y etcéteras. Suena todo tan bucólico, tan idílico y tan profundo que a más de uno no le convencerá. Desafortunadamente, somos muy aficionados en este país, se llame como se llame, a desprestigiar trabajos tan sinceros. 


"Adéu alarmes, adéu mil reunions, 
adéu 15.000 mails per matí. 
Adéu trucades, agobios, tensions,
adéu-siau, a mi ja m'heu vist prou.
Que avui me'n vaig, abandono,
ho deixo, ja prou, s'ha acabat aquest joc!
És tan intens, i es veu tot tan més clar
quan vius com si dijous s'acabés el món
que vull començar de nou,
que avui començo de nou. 

Adéu mirar pel futur,
adéu comptar el calers
que queden dins del pot.
Adéu queixar-se per tot,
adéu veure-ho tot fosc
i enfadar-se amb el món.
Que avui me'n vaig, abandono,
ho deixo, ja prou, s'ha acabat aquest joc!
Visca Banyoles, la Brugui
l'estany i la gent del 800 i can Pons!!
Que aquí começo de nou!
Que aquí he començat de nou!
"

domingo, 23 de noviembre de 2014

Portugal.The Man - "Modern Jesus"

Revisemos la religión... al fin y al cabo, encaramos la directa hacia Navidad. Es un buen momento para indagar sobre ese extraño matrimonio entre rock y evangelio. Digo extraño porque, en principio, hemos caído en la trampa de entender ambos fenónemos como incompatibles, incluso antagónicos, cuando en el fondo comparten intereses comunes: entre ellos, gestionar los atisbos de protesta y convertir lo inmutable en el único escenario posible. Ejemplos hay muchos en la historia de la música popular, pero vamos a uno de los más recientes: se trata de la banda estadounidense Portugal.The Man. Del epicentro mundial del fundamentalismo cristiano surge este grupo, con un espectacular audiovisual acompañando al tema "Modern Jesus".


El título, ya de por sí, aporta pistas sobre el mensaje: no nos hacen falta nuevos dioses porque nosotros somos autosuficientes. Todo ello enlatado en un genial montaje de imágenes y escenas a manera de estampas impagables de los estados sureños. Si estéticamente la calidad es indiscutible, el mensaje se queda corto, demasiado corto, algo que ya no debería sorprendernos porque prácticamente se ha convertido en el leitmotiv de la música independiente desde que dejó de ser eso, independiente. Lo que parece una crítica a la piedra angular de la esencia americana, la religión, queda sumergida sobre capas y capas de imágenes bellísimas al son de un estribillo tan marcado como fácilmente recordable.

Don't pray for us
We don't need no modern Jesus
To roll with us
The only rule we need is never giving up
The only faith we have is faith in us 


Lo que encontramos en "Modern Jesus" es, en esencia, un producto de forma excepcional y contenido mínimo. Tenemos mucha población negra. Y pobre. Resulta que la pobreza siempre se ha cebado con ellos desde que llegaron al continente. Esos jóvenes de color se dedican a pulular por iglesias rebosantes de simbología y riqueza, por pequeños pueblos sumidos en la vida del campo; en definitiva, por infinitos descampados donde la distracción oscila entre drogas y armas como evasión a la economía rural. Jugando a criticar los tópicos, pasan por encima de ellos como si se tratara de un torero que no se atreve a matar a la bestia. Si no la matas te devolverá la cornada, seguro. 


Siete discos después el éxito les ha llegado a los de Alaska. Ahora bien, ¿qué ha pasado durante todos estos años? Pues que la etiqueta indie se ha consolidado como punto de referencia de la modernidad, concentrando la creatividad en paralelo a la evasión y a años luz del activismo. Afortunadamente, siempre quedan excepciones, cada vez más complicadas de encontrar. Lo mismito que hacen Gourley, Carothers y compañía es ejecutado, con distinto resultado, por Future Islands. La sensación, más compensada: una especie de nostalgia más próxima a la parodia que al tópico. Es de agradecer.


viernes, 14 de noviembre de 2014

The Cure - "Pictures of you"

Hubo un tiempo en que un señor llamado Robert Smith se tragó todos los tópicos del Romanticismo, hizo su digestión y, durante una década, los fue regurgitando poco a poco en una apoteósica colección de singles. Todo empezó en aquel imberbe Three imaginary boys y todo acabó, porque la verdad es que acabó, con su obra maestra, Disintegration. Lo que vino después fue como remover los cubitos de un refresco saboreado y agotado; lo bueno ya había pasado y, lo peor, estirar un poco más la inspiración se revelaba complicado. 


En aquel extraño disco de finales de los ochenta destacaba, entre un excepcional cúmulo de joyas de larga duración, la imagen de Smith observando fotografías y gestionando los recuerdos de alguien que ya sólo le servía para el agridulce ejercicio de la evocación. Las grandes obras suelen tener ese particular making of que las hace distintas a las demás y este caso no es una excepción. La banda hacía aguas. Robert Smith tuvo que separarse durante unas semanas del grupo porque un incendio en su habitación se llevó por delante buena parte de las canciones compuestas para la ocasión; además, uno de los fundadores, Lol Tolhurst, fue apartado de las sesiones de grabación por sus problemas con el alcohol. Entre unas cosas y otras el alma máter se deprime, se despeja la mente a base de cocaína y, finalmente, se escabulle de la depresión para casarse con su novia de siempre. Bueno, la verdad es que entre la nieve y el viento parece feliz.


martes, 11 de noviembre de 2014

Telex - "L'Amour Toujours"

A finales de los setenta marcaron la nueva senda desde Bélgica. Sintetizadores a tutiplén para que no faltase de nada a pie de pista; una pista, por cierto, basante animada e improvisada. Y, sobre todo, mucha ironía. Se les ocurrió ir a Eurovisión, eso sí, sin llegar al extremo de Rodolfo Chikilicuatre.


En verdad, representaron junto a Kraftwerk y Devo la democratización máxima de la máquina a finales de una década que, sinceramente, se estaba plagando de dinosaurios recién entrados en declive. Menos mal. A la belleza también se llega sorteando clavijas y cables.


martes, 4 de noviembre de 2014

Black Sabbath - "Paranoid"

Se fueron a por unas cervezas y Iommi se quedó improvisando con la guitarra. Se topó con la idea. Era pegadiza, pero la memoria es muy puta, así que decidió repetirla y repetirla una y otra vez para que no se le olvidara hasta que llegara el resto de la banda. De esta manera nació el tema "Paranoid", de un momento de iluminación de no más de media hora que llevaría a Black Sabbath a lo más alto, no sólo de las listas, sino de la historia más reciente de la música popular. Ahora se cumplen 24 años de la publicación del segundo disco de los ingleses, cuyo título inicial iba a ser War Pigs. Tenía alusiones a la guerra del Vietnam que la productora decidió cambiar a Paranoid para no herir susceptibilidades de, paradójicamente, oyentes que seguro no iban a escuchar la obra.


 Sobresale una canción sobre un tarado, sobre alguien que pide ayuda porque no está en sus cabales; en el fondo, una oda al desequilibrio que se publicó cuando el terror empezaba a hacerse hueco en los cines de todo el mundo. Al miedo había que ponerle banda sonora, y en esas que se fue gestando un género musical que volvió a la oscuridad para ya nunca salir de ella. Como suplica en primera persona el personaje, ¿alguien puede ayudarme a tener ocupado mi cerebro? 


viernes, 24 de octubre de 2014

Villanueva - "Bombas Nucleares"

Hubo un tiempo en el que las plazas gallegas lo eran (casi) todo, quiero decir, musicalmente. En aquellos tan recacareados años ochenta la zona se erigió en cantera excepcional de artistas. No se trata de hacer palabrería barata: aún hoy retumban fuerte en la cultura peninsular de andar por casa los sones de Coppini (recién marchado hacia el más allá), o Antón Reixa (recién vuelto del más acá de las instituciones) o, incluso, los Siniestro, columna vertebral durante lustros de una escena autóctona que ha mantenido siempre un altísimo nivel de creatividad. Sigue vigente la inspiración, y no sólo con Triángulo de Amor Bizarro, pues el abanico de posibilidades se revela amplio y diverso. Paremos, por ejemplo, en Vigo, yacente en su lejanía con vistas al mar. Allí encontramos a Josete Díaz, nadando vestido por la ría y de paseo histriónico por el Mercado del Calvario. 


De segundo Villanueva, se ha puesto a escribir sus sensaciones Vigo-Madrid-Vigo en un hermoso manojo de canciones sobre la belleza del trayecto. Lo bueno de la distancia es la cantidad de tiempo que te da para la reflexión, como si se tratara de un preso con años por delante para alcanzar la libertad. Dicen que uno de los lugares más bellos para perderse en las canciones es el movimiento, y del movimiento y de la falta de permanencia viene el nuevo catálogo de imágenes y metáforas que propone este mayúsculo compositor. Con Viajes de ida nos situamos ante una recreación poética del trecho, un largo poema al encanto del periplo, con el paisaje haciendo las veces de actor secundario, claro está, de lujo. Primera parada: "Bombas nucleares". Visita recomendada: "Ahogándonos". 


miércoles, 22 de octubre de 2014

Led Zeppelin - II

Eran otros tiempos. Las bandas publicaban un disco de un año para otro. Nada de postergar las canciones; se componen y se graban durante la gira. Todo en uno: conciertos, escritura y producción al mismo tiempo. El segundo álbum de Led Zeppelin, publicado un 22 de octubre de 1969, fue el resultado de las prisas, la improvisación y el compromiso, y cuando los elementos se ponen en contra y tú, pase lo que pase, cumples con un buen trabajo, nadie puede discutir que juegas entre los grandes. Aquellos nueve temas formaban un conjunto tan compacto que en las listas anglosajonas le arrebataron el testigo al mismísimo Abbey Road de los Beatles.



Eran "Whole Lotta Love" y "Heartbreaker" los fragmentos más celebrados, pero elegimos otro: con sabor a Joplin, se trata de una auténtica explosión de blues en la que Robert Plant bordea los límites de la voz para dar rienda suelta de forma muy insana a su sexualidad. Nos topamos con la rabia y la obsesión, con el reproche hacia una figura femenina a la que no puede abandonar. Y todo ello con unos cambios de ritmo entre el erotismo y su clímax más repentino. El castigador castigado. Esa es la historia de "The Lemon Song".


domingo, 12 de octubre de 2014

The Prussians - "Cold Trees"

Gracias infinitas a The Prussians. Porque sí. Porque te hacen confiar de nuevo en la juventud y porque, al fin y al cabo, uno nunca sabe si en veintipocos años estas generaciones nos pagarán las pensiones o tendremos que mendigar en las oficinas pertinentes. Baleares también existe; no es sólo Formentera o la "People from Ibiza". Hay vida, y mucha, porque este quinteto mallorquín se revela como la excepción que confirma la regla. Se han metido los ochenta entre pecho y espalda, los han aderazado con lo mejor de los noventa y ahora, con los dosmiles más que avanzados, se lanzan a la aventura de editar un disco con los malos tiempos que corren para la lírica. Tal vez haya salvación para nosotros. Como diría uno que yo me sé, "el milenarismo va a llegar". 


Su primera criatura la han bautizado como Mul Mul. Nada nuevo si lo que buscamos es sorpresas, pero es que en el mundo de la creación artística casi todo está inventado. Lo bueno de estos chavales es que se atreven con la elegancia, con el virtuosismo contenido de los grandes, en definitiva con el pop de altos vuelos de hitos tales como Viva La Vida, The Unforgettable Fire o Hearbeat City. La imitación es buena, sobre todo en la flor de la vida, y si para encontrar el camino hay que indagar en las sendas ajenas, pues bienvenida sea la mímesis. Y es que para pintar bien, no nos engañemos, antes hay que echarles un vistazo a Velázquez y Goya.


viernes, 10 de octubre de 2014

Sam Roberts Band - "Shapeshifters"

Si se trata de bailar con el equipaje de Adidas, pues lo haremos. Pero lo haremos al otro lado del Atlántico, en la capital del globo terrestre, esa urbe que ha sufrido siempre la invasión de los marcianos más malignos de todo el universo... Cómo se ceba la mala suerte con Nueva York. Es entrar en un cine y tener que padecer sin cesar la furia de seres de alguna galaxia de extrarradio. Volvamos a Brooklyn. Subiremos al metro y nos iremos a la playa, a Coney Island, que con la nieve sobre el paseo maritimo es un buen escenario para sumergirse en el movimiento, visto que el parque de atracciones está cerrado.


Que la Sam Roberts Band juegue en la Champions no es casualidad: además de temas impecables, los audiovisuales responden a las expectativas propias de alguien que quiere hacer las cosas, como mínimo, bien. Con Lo-Fantasy llegamos al quinto peldaño de su carrera, ascendente y perfectamente gestionada con el rock como piedra angular de un sonido renovado en cada uno de sus trabajos. Los de Quebec recurren en cada entrega a las influencias más diversas, desde Ray Charles hasta Fela Kuti, de Underworld hasta los Clash; en algunos momentos muy Charlatans, en otros tan clásicos como los Stones. Lo dicho: no es casual.


martes, 7 de octubre de 2014

Jungle - "Time"

Los duelos ya no se llevan. ¿Qué fue de las pistolas, de los padrinos, de las citas en el bosque para matar o ser matado? Ahora la historia es distinta. El combate, en una cancha de baloncesto. ¿Hay balón? Pues no. Sólo una lucha cuerpo a cuerpo, con coreografías de calidad contrastada para morir posando con la víctima. El audiovisual de Jungle se ajusta a la perfección a ese soul de altos vuelos que caracteriza a la banda inglesa del momento. O, mejor, hablemos de colectivo, eso sí, liderado por el dúo Lloyd - McFarland. Con la mismísima BBC como garante del grupo (nunca mejor dicho), el proyecto asume la tradición disco en su vertiente más soul.


Vamos con la parte negativa. Contar con el beneplácito de buena parte de la crítica y, lo peor, padecer un no parar de palmaditas en la espalda diciéndote lo grande que eres y lo bien que haces las cosas puede, sin lugar a dudas, hundirte en la miseria. Se llama languidecer, y es propio de aquéllos que suben a la cima y que luego no saben volver al pie de la montaña por el mismo camino que subieron. Que el falsete está muy bien... es verdad, pero no es nuevo. Como Jimmy Sommerville, ninguno. Bee Gees lo bordaron, Modern Talking lo exprimieron hasta la desesperación y Prince, entre el éxtasis y la egolatría, lo elevó al cielo en alguno de los momentos más catárticos de la música popular de los ochenta. Recapitulando: en principio, excelentes; el futuro, incierto si la fórmula se estanca.


domingo, 28 de septiembre de 2014

Bear In Heaven - "Time Between"

Jo, qué noche, segunda parte. El videoclip de "Time Between" recuerda a Martin Scorsese y, en concreto, a aquella película menor dentro de su trayectoria, After Hours, en la que abordaba la noche neoyorkina. Aparte de que la canción es espectacular, su audiovisual lo engrandece más. Nos encontramos con una serie de personas en plena mutación nocturna. Ha acabado la jornada laboral y ahora toca ser nosotros mismos. Al protagonista del film de 1985 no le dieron tiempo para mostrarse; la noche se le hizo tan corta como eterna y, de repente, se encontró en la oficina a primera hora de la mañana; a los jóvenes presentados por Jon Philpot les sobran horas para cambiar de piel. La vida en la Gran Manzana tiene esas cosas: o buscas salidas a la nada o la nada te come.


El proyecto Bear in Heaven superó hace un par de años la década de existencia, y lo hizo evolucionando favorablemente. En su cuarto trabajo, Time is over one day old, el sonido sigue ganando en fuerza, en presión, en personalidad. El tono épico alcanza cotas espectaculares a base de coros y silencios muy bien gestionados. Tal vez por el protagonismo cada vez más evidente de la percusión, tal vez porque los de Brooklyn son más mayores y la experiencia siempre es un grado, Bear in Heaven se regocija de nuevo en un canto contundente a la soledad, a la muerte y al vacío. Todo un preámbulo para superar el miedo a tener miedo.


martes, 23 de septiembre de 2014

The Soundcarriers - Last Broadcast

La canción tiene casi cuatro años, pero puestos a revisar vale la pena recuperar esta maravilla, y ahora más, porque The Soundcarriers acaba de publicar Entropicalia. La banda de Nottingham presenta su cuarto disco, confirmando lo que ya se veía venir en los momentos pretéritos: que la fórmula resulta. La fórmula tiene su intrínguilis. El esqueleto, idéntico, pero la piel ha sufrido unas extrañas mutaciones que nos las tendremos que hacer mirar. Tenemos una exacta mezcla de psicodelia, barroquismo y cinemascope de televisión por cable que desubica hasta al más metódico de los melómanos.


Se reduce a un juego de contrastes. El sonido hunde sus raíces en los sesenta, si bien desprende un halo de actualidad que convierte la propuesta en, y ya hace tiempo que esto viene pasando, intemporal. Porque trabajar en la anacronía desde una perspectiva estética supone, inevitablemente, ganarle la partida al tiempo, y es de agradecer el interés de muchas bandas actuales por darle un nuevo revolcón al retro con sacudidas más refinadas que salvajes. Además, la combinación de voces... Todavía queda mucho por escarbar en nuestro pasado más inmediato.


domingo, 21 de septiembre de 2014

Liam Gallagher logra cumplir 42 años

Irritante hasta la médula, te lo podrías encontrar en Benidorm, en Magaluf, en un estadio de la Champions siguiendo al City, en quién sabe cualquiera de esos lugares tan propios de sus compatriotas. Y seguramente lo estrangularías, por soberbio, maleducado, ególatra, por llevar a su manera todas las condiciones que le exigimos a una estrella del rock. Pues ahí está. Se llama William John Paul, responde al nombre de "Liam" Gallagher y cumple 42 años, lo que demuestra que no ha perdido el tiempo en absoluto. 


Esa chulería barriobajera ante el micro, perdonándonos la vida al borde casi del escupitajo, con una voz que la crítica inglesa ha situado entre Lennon y Rotten, esa pose, digo, pasará a la historia popular como una de las más características, tal vez la que más, de lo que conocimos en los noventa como britpop. Escándalos y propagandas aparte, su influjo cultural es paso obligado para todos aquellos que quieran conocer cómo se leyó e interpretó el legado Beatle en el cambio de milenio. Ahora sigue, con Beady Eye, pero los viejos tiempos nos gustan más.

jueves, 18 de septiembre de 2014

Fujiya & Miyagi - "Flaws"

El que encendió la máquina no era consciente de lo que podía dar de sí. Arrancarla suponía no apagarla jamás, y así sucedió. Unas cuantas décadas después seguimos dando alimento al monstruo. Por eso, y solo por eso, inventamos la palabra 'krautrock', porque debíamos anular a los clásicos tarde o temprano. He aquí, por tanto, el triunfo de la modernidad, y he aquí la máxima razón de que grupos como Fujiya & Miyagi sigan subidos al gran interruptor, elevando la repetición a categoría de arte a través de ritmos sumidos en una obsesión para nada desconocida.


Los de Brighton presentan Artifical Sweetners, otra entrega (ya van cinco) sobre los delirios del hombre moderno en su trato con la tecnología. El proyecto, con casi quince años, presenta ahora su sonido más perfecto y depurado, tras un largo recorrido en el que ha habido de todo, desde momentos complicados cercanos al desaliento hasta la participación en series como Breaking Bad. Lo consiguió "Uh", y parece que fue suficiente para espantar a los fantasmas. Ahora llega "Flaws", una especie de manual inevitable para los adictos a la interferencia. Ya podemos afirmar sin miedo que la recepción se ha completado. 

    lunes, 15 de septiembre de 2014

    Silvia Pérez Cruz & Raül Fernández Miró

    No tiene sentido hacer un disco de versiones si no vas a romper las canciones. Tocarlas igual para lucimiento vocal es perder el tiempo. Dicho de otra forma: si hay que hacerlo, al menos que valga la pena; de lo contrario, nos quedamos en la nada. Silvia y Raül, Raül y Silvia, mitad y mitad de un concepto para amantes de la esencia, reúnen en granada una docena de clásicos de alto estánding. Pasados por el filtro de su voz y de la guitarra más eléctrica del mundo, alcanzan la categoría de inmensos porque, si difícil es mejorar la cima de un autor, más lo es todavía culminarla por caminos inescrutables.   


    "Pequeño vals vienés" evidencia lo arriesgado de la apuesta. La cantaba Morente sobre una adaptación anterior de Leonard Cohen. Pero... ¿adaptación de qué? De los versos más intensos de Lorca, de Poeta en Nueva York, cuando el de La Fuente marchó a la Universidad de Columbia para impartir unas conferencias en 1929. Qué casualidad que el poeta llegara en pleno Crac, y qué bendición para los amantes de la poesía, pues pocos han sido los que en castellano han logrado un retrato tan atroz y poético de la sociedad capitalista. La actuación, en Barcelona.



    lunes, 1 de septiembre de 2014

    Owen Pallet - "The Riverbed"

    "La vida es lucha", decía Eurípides, y pelea también, añadiría Owen Pallet. El canadiense publica nuevo trabajo, In Conflict, una intensa apología sobre el conflicto humano, en todas las variantes, internas y externas. Su particular forma de entender el pop, de cámara según buena parte de la crítica, lo convierte en una de las propuestas más interesantes del momento, máxime cuando hablamos de un género reñido consigo mismo y que parece condenado a morir en la electrónica. Arreglista de profesión y violín en mano desde los tres años, Pallet se liberó del minimalismo hará ya una década para ir sumando sonoridades y acabar creando un conjunto que, ineludiblemente, tiene la obligación de ser perfecto.


    Como narrador, también tiene su punto. No pasa nada, o eso parece. Un señor de avanzada edad, jubilado y con la única ocupación de mantenerse en forma, ha quedado con alguien para ver atardecer. El aburrimiento le da una tregua. Todo va bien, pero cuando parece que la historia llega a su fin, con el horizonte nocturno de los rascacielos y las luces de la colmena urbana, la cosa se complica. ¿Semejantes humillaciones? No hay razón para pasar por algo así. Y ellos todavía están en el mismo sitio. Ritmo e intriga en su justa medida. El punto medio, siempre tan complicado de alcanzar. 


    jueves, 28 de agosto de 2014

    Peret - "Una lágrima"

    Nuevo capítulo de 'Paradojas de la Historia'. ¿Cómo es posible que un señor, de etnia gitana y de origen catalán, cosechara tal éxito durante el régimen franquista? Una posible respuesta: No comment. Qué más le daba a la censura. Lo importante era que el nombre de España sonara a nivel mundial y que, sobre todo, no fuera sinónimo de dictadura. Y ahí entraron entre los mejores Peret o Los Bravos, además de una larga lista de juguetes rotos que todavía hoy son regurgitados por la televisión para delirio de nostálgicos de aquella época de encefalograma plano cultural. Afortunadamente, Peret fue mucho más que eso, y el tiempo le ha dado la razón. Ineludible hablar de él como alma máter de la rumba catalana. 


    Murió ayer sin que le diera tiempo a cumplir ochenta años. Si sirve la muerte para indagar lo que fue la vida, la vida nos lleva al hijo de una familia humilde que no fue a la escuela porque tenía que vender telas con su padre, que aprendió a leer de forma autodidacta a través de los carteles publicitarios que iba encontrando entre Cataluña y Baleares, que muy joven viajó a Argentina no precisamente para tocar la guitarra, etc etc. Primero conquistó Barcelona y, más tarde, un tablao madrileño llamado El Duende que permitió la consagración definitiva de la figura y el género, a partes iguales. Ese giro de guitarra, los dos palmeros, el estampado, las campanas, y lo mejor de todo, el blanco y negro... En la memoria cultural de este país queda el legado y el recuerdo de Pedro Publil Calaf. 


    miércoles, 27 de agosto de 2014

    Los pilotos - "Longitud de onda 585 nm"

    El futuro ya pasó. Nos gusta predecirlo una y otra vez... y otra, pero ya pasó, ya dejó de suceder y, si vuelve (que seguro que lo hace), será para volver a marcharse. Aquí está la clave. Escuchar a Los Pilotos es como perderse en el tiempo, entrar plácidamente en la confusión para, al fin y al cabo, reescribir la historia con las imágenes atascadas en el recuerdo. De gran calado audiovisual, el segundo trabajo de Floren y Banin, paralelo a Los Planetas, se titula El regreso de Logan y sabe a viaje, tal vez a ninguna parte, pero viaje en definitiva, y ya llevamos unos cuantos acabando agosto. 
    Elaborado entramado de melodías, la obra sugiere que después de la fuga hay vida, y que la acción permanece en pretérito imperfecto, todavía sin acabar... Curiosa forma de recordar lo que vendrá. Además, si mezclas guitarra y electrónica, sin solemnidad ni épica, sin recurrir a la tragicomedia y con el único objetivo de darle un gustazo a los sentidos, el resultado es un poema sensorial, dibujado para los oídos, como si de un caligrama cubista se tratara. Mezclamos luz y oscuridad a varias velocidades, agitamos... et voilà, el postre está servido. Cambio y movimiento, como le hubiera gustado a Heráclito. 


    lunes, 25 de agosto de 2014

    America - "A Horse With No Name"

    Una ciudad cualquiera de la India. El tránsito, un infierno. Pero nada como el caballo sin nombre de America para combatir al diablo. Toyota se ha llevado el gato al agua con su última campaña para uno de sus híbridos. El anuncio es, simplemente, genial. Volvamos a la escena. Lo lógico sería para un conductor occidental desfallecer en plena calle intentado avanzar unos míseros metros. Sin embargo, nada más lejos de la realidad, porque (y aquí vienen los instantes publicitarios) con este coche usted volverá a disfrutar en grado máximo de la conducción en todas sus formas. Y para que todo resulte más idílico, uno de los himnos más bellos del folk anglosajón: "A horse with no name", de 1971. En la canción se recrea un viaje a través del desierto como excusa para perderse en la naturaleza y en lo que no es la naturaleza.


    Aquel trío tenía su miga. Para empezar, America se gestó en Londres, concretamente en un colegio al que acudían los hijos de militares y funcionarios estadounidenses en el extranjero. Fue allí donde Dan Peek y Gerry Beckley comenzaron a dar forma a un proyecto que se completó en la universidad con Dewey Bunnell. La base: guitarras acústicas y melodías al por mayor. Cuando los setenta tocaban a su fin uno de los fundadores, Dan Peek, decidió que tenía que darle un giro a su vida. Cansado del alcohol y las drogas, optó por abandonar el grupo y probar suerte en... el rock cristiano. Lo petó hasta su muerte, hace tres años.
     

    Aquí va el anuncio de Toyota. 
    https://www.youtube.com/watch?v=t8WvNosqcRk

    sábado, 23 de agosto de 2014

    Gruff Rhys - "American Interior"

    Lo de perderse en las raíces no es algo que se le haya ocurrido de la noche a la mañana. Primero le dio por buscar a un tío suyo en la Patagonia, y narró y cantó y filmó la travesía en Separado!, junto a Dylan Goch en 2010; ahora desanda el camino hasta el siglo XVIII y rastrea el legado del explorador John Evans en los USA. El retrato, tópico y atípico por su lirismo, es la suma de ríos, desierto, cumbres nevadas, moteles, estrellas y cactus de rotulador, un policía violento y, por supuesto, las infinitas carreteras por las que nadie pasa porque no hay nada que ver.


    Gruff Rhys maneja con maestría ironía, nostalgia y parodia para dibujar las andanzas de un galés por los Estados Unidos; ahora bien, no hay arena, ni olas, ni surferos, ni tampoco luces de discoteca ni pistas multicolor de baile con coreografías colectivas. El que fuera líder de Super Furry Animals se mete por caminos y sendas, radiografía a los árboles y, en definitiva, sacude los espíritus de pioneros e indios para fotografíar al extraño que husmea en la tierra de sus antepasados. Así pues, este American Interior se revela como un trabajo completo, con documental adjunto, además de libro y aplicación, soportes de apoyo para conocer la visión de un creador que se mueve de forma notable en lenguajes diversos. Metido a Kerouac, pero a su manera.




    miércoles, 20 de agosto de 2014

    Led Zeppelin - "Whole Lotta Love"

    Robert Plant es uno de esos artistas que sigue vivo por obra y gracia del destino. Ni los excesos, ni las groupies, ni siquiera los accidentes de tráfico consiguieron en su día alejar al de West Bromwich de los escenarios; lo más curioso, que sus mejores obras ya han cobrado la calidad de clásicos estando él aún en vida. El cantante de Led Zeppelin, considerado como una de las mejores voces de todo los tiempos, cumple hoy 66 años al tiempo que su leyenda no para de crecer. 


    Allá por 1973, cuando ya habían publicado la portentosa "Whole lotta love", su voz experimentó matices nuevos y, tal vez, premonitorios. ¿Cuáles fueron las causas? Se barajan diversas teorías: unos creen que el alto consumo de cocaína nasalizó su voz hasta el punto de perder el sello de antaño; otros, que desde muy joven la había forzado al máximo, ocasionándole la aparición de nódulos que tuvo que extirparse. La corrección de su mala dentadura, en definitiva, también tendría algo que ver. He aquí, en fin, la mejor muestra del prodigio, abriendo el Led Zeppelin II de 1969.


    jueves, 31 de julio de 2014

    The Souljazz Orchestra - "One life to live"

    Para combatir el frío canadiense, nada como la fusión sonora. Lo que pasa es que en Ottawa, cuando hace frío, lo hace de verdad. Allá por noviembre caen los primeros copos, y no se deshacen hasta abril, por lo que o te calientas o te calientas. La fusión, con toda la plenitud de la palabra, supone la clave para sobrellevar el invierno de la que se considera la tercera capital más fría del mundo, después de Ulán Bator y Astaná. Así pues, The Souljazz Orchestra propone la mezcla, la unión.. en el fondo, una aleación de sones de diversas partes del globo, como aquellas big bands que vestían al baile con polifonías de las calles más calurosas del hemisferio sur. 


    Con Inner Fire suman ya seis trabajos discográficos, siendo la experimentación la columna vertebral de un proyecto más que consolidado. Su receta no parece complicada: esencia africana, sones latinos, mucho soul y mucho jazz... y lo que sale es fácilmente imaginable: un variado catálogo de ritmos para recuperar el sentido más lúdico y primigenio de la música, ese espíritu que se te cuela en el tímpano y que hace reacción empezando por los pies, remontando la cintura y acabando en brazos, cuello y cabeza. Una vía al hedonismo a través de las raíces.


    sábado, 26 de julio de 2014

    Single - "Rea"

    Parece un caramelo para el estío, pero un caramelo frío, que lo dejas a la intemperie y se va deshaciendo poco a poco en una mancha difícil de quitar. El proyecto Single, de Teresa Iturrioz e Ibon Errazkin, es como un revoltijo muy cuidado para los sentidos... Si tuviera tacto sería como el de una estrella de jabón, una pastilla muy gastada al lado de los cepillos electrónicos. Además, desprende luz, mucha luz; y se nutre de un sinfín de matices sonoros, tal vez demasiados, pero estando Hidrogenesse en la sala de máquinas era algo inevitable y, no nos engañemos, también deseado.  En definitiva, sabe a colección primavera-verano. 


    De título Rea, el nuevo trabajo de estos dos auténticos pesos pesados de la cultura independiente nacional se caracteriza por lo sorprendente y diferente de la propuesta. Con el reggae como punto de partida y, en especial, el lovers rock como subgénero anglojamaicano más próximo a las canciones de amor, la ex Le Mans elabora unos textos tan originales como inusitados. Ahora bien, la producción de Genís Segarra ha permitido darle un giro a la idea inicial, a medio camino entre el dub, el electropop y, cómo no, la base tropical. Curioso el estribillo; lo dicho, como ese caramelo derretido que deja marca sobre la mesa del jardín. 

    "Y en tus brazos
    yo me siento rea
    rea de ti"



    jueves, 24 de julio de 2014

    Hercules & Love Affaire - "I try to talk to you"

    Tema tabú: VIH. Los neoyorkinos, y en concreto su alma máter, Andy Butler, traspasan los límites autoimpuestos por la industria discográfica para hablar de la vida después del estigma. Y lo hacen con alguien que sabe mucho del tema, el señor John Grant, cuyo último trabajo, precisamente con temática idéntica, ya tratamos allá por el mes de febrero. "I try to talk to you" se revela como una excelente colaboración entre Hércules and Love Affaire y el barbudo de Dénver, en la que los primeros ponen la producción y el segundo se ocupa de la voz y la letra.

    Andy Butler y John Grant, segundo y tercero por la izquierda.

    La suma de teatralidad, coreografía y cierto dramatismo se dan cita en un producto final interesante, llamativo, que no debería dejar indiferente pero que, por contra, tiene una duración lo suficientemente corta como para ser olvidado de inmediato. Fue hace un par de años cuando Grant aprovechó un concierto con Hércules y compañía para declarar al mundo que era seropositivo. Lo que parecía una esporádica vomitona de sinceridad se ha prolongado en el tiempo y, lo mejor, con un sonido que recuerda los mejores momentos de los chicos de la tienda de animales.


    lunes, 21 de julio de 2014

    Future Islands - "Balance"

    Y después del mar...¿qué? Una pregunta demasiado clara; reproche puro y duro de la chica al chico. Seguro que le prometió que serían muy felices, que podrían salir adelante sin problemas, que con el amor que se profesaban el uno por el otro no tendrían problema alguno, etc... Y ahora, vaya por Dios, la  realidad: hambre y cansancio, y si hay un sueño americano en algún sitio, seguro que ahí, en América, no está. 


    No leamos la letra en clave negativa. Pensemos que el chico sólo pide tiempo. Será complicado seguir avanzando, nos podremos topar con los coches, las casas vacías, los cines derruidos, incluso el océano, pero como si se tratara de un curso de coaching o del título de un manual de autoayuda, el cambio es posible. We can! Precioso el vídeo que planteó Future Islands para el tema "Balance", perteneciente al álbum On the water (2011).

    "It just takes time
    Hard work and your time
    You can change your life"


    Los de Baltimore, liderados por Samuel T. Herring, retornan a la actualidad. Saltaron a la palestra a finales de marzo para presentar su nueva entrega, Singles. No obstante, llevan desde 2006 dándole a eso del synthpop, logrando hasta el momento cuatro trabajos más que aceptables. Y en directo... pues podemos hacernos una idea con su actuación en el show de David Letterman. No puede negarse la vena artística que vertebra el proyecto. Los orígenes del grupo, en la Escuela de Arte de la East Carolina University. 


    viernes, 18 de julio de 2014

    Quantic - "Duvidó"

    Si seguimos con la mezcla y el mestizaje nuestro destino es Magnetica. Se trata del nuevo trabajo de Quantic, pseudónimo (uno más) del prolífico Will Holland. Una maravilla, con ciertos altibajos, pero maravilla al fin y al cabo. Partiendo de la raíz, pasando por la electrónica y, lo mejor de todo, volviendo a la raíz, cada uno de sus trabajos acaba siendo un homenaje a la experimentación con los útiles de siempre, a caballo entre América y África. Tendríamos que marcar con un rojo muy intenso el día en que a este señor inglés le da por publicar algo. Otra alegría, y ya van muchas desde 2001, cuando editó su primer trabajo, The 5th Exotic.


    El single de presentación se titula "Duvidó". La angoleña Pongo Love pone voz a un ritmo genuino y auténtico, nacido de las entrañas de la tierra y por el que es difícil pasar sin sucumbir al movimiento. Después de Cali, donde se adentró en la cumbia para disfrutarla sin ánimo de arrebatar nada a sus dueños, ahora amplía una vez más sus líneas de actuación y retoma culturas. Sin resistirse a abandonar Colombia ni el Caribe, Holland sigue buscando la esencia, y ahora se detiene en África. Una pena que lo único que sepamos de un continente tan grande sea lo que informan los medios de comunicación: sólo conflictos bélicos y desastres naturales. 


    lunes, 7 de julio de 2014

    José Domingo - "Palidez"

    Llega la última sensación... ibérica. La música de José Domingo es como un engañoso juego de espejos. Parece que es más de lo mismo y, sin embargo, el tema no está tan claro. Y no lo está porque ves muchas cosas y no ves ninguna. Ves psicodelia, y ves rock andaluz, como si de Triana se tratara. Y ves a gente como Gabinete, sobre todo en lo canalla, y a aquellos Seguridad Social que tanto éxito tuvieron cuando se les pasó lo del punk. Y si nos ponemos más trascendentales, encontramos el rastro de Dalí, de Buñuel, de las vanguardias en su vertiente más dadaísta y surrealista, y también ves el cine español de los setenta, sobre todo en lo que al audiovisual se refiere: sucesión de desnudos femeninos entre la extrema delgadez y la curva más acentuada. 


    En resumen, ves tantas cosas y no ves ninguna porque José Domingo representa un paso más allá, aquel paso que hacía mucho tiempo que el rock hispano tenía que haber dado y que se quedó encallado en La canción de Juan Perro. En su nuevo disco en solitario, de nombre Almería, el de Girona se adentra en una mítica que desprende sur por los cuatro costados. Ya su título remite al spaghetti-western, y mezclado con grandes dosis de ironía y poesía da como resultado un trabajo discográfico inusual... por lo excelente. Daba la impresión de que el modelo estaba agotado.


    domingo, 29 de junio de 2014

    Perfect Pussy - "I"

    Ya era hora de que el revival llegará también al punk. Tantos artistas sumidos en un remember continuo, recordando y repitiendo esquemas de tiempos pretéritos... y, sin embargo, a ningún punk le había dado todavía por volver a los orígenes (tal vez porque el punk nunca ha superado la línea de salida). Lo cierto es que el nombre del grupo tiene su miga, sobre todo en Google Images, y su sonido resulta tan troglodítico y salvaje que cuesta digerir un rostro tan bello como el de Meredith Graves jugando a hacer filosofía punk... pero del punk más primigenio, de aquél que se gestó durante la década de los setenta en paralelo al primer sonido disco. 


    Los de Syracuse, Nueva York, retornan al origen, y lo combinan con letras íntimas, con un cierto interés poético por mostrar los sensaciones y sentimientos de un yo (lo de "I" es más que significativo) que se nutre de la lírica y la narrativa que arranca con el Romanticismo. Y el contraste es mayor cuando comprobamos como a esa carencia de melodía se añaden rostros angelicales rebosantes de felicidad en medio de la tormenta de ruido. ¿Y aquéllo del 'No future'? ¿Qué fue de la anarquía, de las crestas, de los cuadros escoceses? En definitiva, ¿en qué parte de la historia el cabreo con la sociedad se cambió de bando? Perfect Pussy revisa, y hacía falta, la imaginería punk y, lo más importante, suprime sin piedad cualquier mínimo indicio de dulzura o suavidad. Hacía tiempo. 


    jueves, 19 de junio de 2014

    Invisible Limits... o cómo Alemania metió a la metafísica en un sintetizador

    Los cambios de década ya no son lo que eran. El nivel lo dejó muy alto la revolución punk de finales de los setenta. Aquéllo, sin lugar a dudas, dio un vuelco a la cultura contemporánea, llegando sus efectos hasta la actualidad. Ahora bien, el paso de los ochenta a los noventa no se quedó corto en sensaciones, sobre todo en la vieja Europa. Con la antigua Unión Soviética directa hacia el abismo, Alemania fue ganando protagonismo a lo largo de la década. Además de motor económico, controlaba (como lo sigue haciendo ahora) la política continental, si bien en el ámbito cultural lo anglosajón seguía siendo la referencia. En este marco encuadramos a la vanguardia germana, a grupos como Kraftwerk, Wolfsheim o Invisible Limits; y es aquí, igualmente, donde ubicamos dos himnos del synth pop, espectaculares, que cumplen el cuarto de siglo en este 2014: "Golden dreams" y "Natalie's".



    Invisible limits: he aquí la cuestión. Cuatro jóvenes subidos al carro de la electrónica. Su origen lo encontramos en Dortmund, más famosa en este presente de 2014 por la concentración de empresas de tecnología de la información y, sobre todo, por el Borussia y ese curioso entrenador de gafas de pasta y sonrisa germano-mallorquina llamado Jürgen Klopp. No obstante, su referencia fue durante los ochenta el carbón, la minería y el acero.


    Viajemos hacia nuestro pasado más reciente. A mediados de los ochenta la ciudad de Dortmund vivía un cambio de identidad. Su industria minera iba languideciendo al tiempo que subía el paro. De inviernos suaves y veranos frescos, y con lluvia prácticamente todo el año, la escena underground centroeuropea reescribía el descontento de la juventud empleando el tecno como arma arrojadiza contra el poder. Thomas Lüdke es la primera referencia. Encargado de coros y teclados, se erigió en alma máter de un grupo que nacía en 1985 y que unos años después abandonaba dejando todo el protagonismo a los señores Küchenmeister, Andreas en la percusión y Marion en las voces. Lo que en su inicio era un cuarteto junto al Ralf Schauf en el bajo se quedaba en un trío que, no obstante, generaba un álbum mítico: A Conscious State. Año 1989.


    El disco arranca con una pesadilla rebosante de imágenes románticas: "Golden dreams". Que quede claro que el adjetivo empleado se refiere al Romanticismo entendido como el movimiento cultural que se dio en Europa a finales del XVIII y principios del XIX. Predomina la oscuridad, la soledad, el miedo a lo desconocido, incluso lo marginal... nada que ver con una visión rancia y simplista del amor. Además, el sintetizador contribuye a generar frío, porque está canción es deliciosamente fría, helada, y la voz femenina contrasta aportando calidez a lo que parece un mal sueño del que no despiertas. Tenemos la típica belleza congelada propia de muchos himnos de los ochenta.




    La segunda maravilla se titula "Natalie's". Invisible Limits prosigue con mucha imaginería oscura, ahora para rendir homenaje a un difunto... bueno, mejor dicho, a una difunta. El tema es una oda, a manera de monólogo, hacia una amiga de la vocalista fallecida prematuramente. Predominan, por tanto, las visiones extrañas, la tristeza por la ausencia y, en definitiva, las preguntas sin respuestas a quién sabe quién o qué. "Natalie's" se ha convertido con el paso de los años en una rara suma de tristeza y resignación, en un bello anhelo hacia la amistad truncada por el destino. Y aquí es cuando la metafísica, como disciplina que se ocupa de aquéllo que no se puede percibir por ninguno de los cinco sentidos, se queda atrapada en las entrañas del sintetizador. Es como una flor ahogada en hilo de cobre. Todo lo que vino después, que ha sido bastante, ya se queda para los historiadores del synth pop.




    lunes, 16 de junio de 2014

    Jessica Lea Mayfield - "I wanna you love"

    Sus referencias oscilan entre la tradición y la modernidad. De familia de músicos, en este caso de bluegrass, su universo personal gravita alrededor de Seattle y, en concreto, de Dave Grohl y todo lo que han significado Foo Fighters. Sin embargo, ha sido otro grande de la música americana, el señor Dan Auerbach (The Black Keys), quien hizo las veces de padrino en su día en la publicación de sus trabajos de 2008 y 2011. Llega ahora Make me head sing, tercera entrega, cuya característica principal es un tono más rebajado y relajado. Dicho de otra forma, Mayfield presenta un estilo minimalista, entre el rock y el country, y con una cierta querencia por la distorsión.


    Nacida en 1989 en Kent, Ohio, a los ocho años ya iba de gira con su familia en el proyecto One Way Rider. A los 11 empezó a componer sus propias canciones, al mismo tiempo que hacía versiones de Foo Fighters. Es con 15 años cuando graba con la ayuda de su hermano un EP titulado White lies, del que se publican sólo cien copias. Una de ellas llega a Dan Auerbach, con quien culmina en 2008 su primera criatura, With Blasfemy So Heartfeld


    jueves, 12 de junio de 2014

    Lykke Li - "No rest for the wicked"

    Parte de la crítica se ha cebado con la sueca. Su disco recién publicado, I never learn, no tiene la misma intensidad que las entregas del pasado. Y qué más da. A sus 28 años y después de unas cuantas vueltas por el mundo, desde Portugal y Marruecos hasta Nepal y Estados Unidos, Lykke Li sigue generando canciones más que reseñables, y ésto por dos razones: primero, porque viene de una familia muy interesada desde siempre por el arte y la cultura; lo segundo, porque no le basta con la teoría. En la práctica, sus inquietudes artísticas se traducen en un deseo por significar algo más que lo esperable. Qué pena, sin embargo, que los títulos de las canciones resulten tan previsibles.


    El vídeo toma como punto de partida la discriminación racial. Se enmarca en el triángulo inmigración-amor-trabajo y bosqueja, a través de una pareja de amantes, la intolerancia en el ámbito rural. En concreto, un hombre de raza negra acaba apaleado en un pequeño pueblo de quién sabe donde. Si no supiéramos el origen de Lykke Li seguramente se nos estaría ya llenado la boca con la "América profunda" y expresiones similares. En resumen, nos encontramos una canción tremendamente bella, con el piano y el estribillo como protagonistas estelares.